Cómo preparar tu propio jabón casero para la cara, de la mano de Anastassia

Fortifica tu jabón con lo que sea mejor para tu piel

¡Qué bueno ese momento en que llega una nueva columna de Anastassia Sfeir! Hoy, la estrella del mundo de la belleza te va a contar cómo preparar un genial jabón casero mejorado, perfecto para darle a tu rostro todo lo que necesita. ¡No te pierdas esta nota!

Leer las habituales columnas de Anastassia Sfeir es siempre un placer. En ellas, la estrella del mundo de la belleza te da sus mejores claves para lograr mejorar tu aspecto siempre, día a día, con cosas fáciles, cotidianas y al alcance de cualquiera.

Su artículo de hoy no será la excepción. Aquí, partiendo de un jabón de nácar, te explicará cómo mejorarlo de forma fácil y casera para que obtengas un elemento más potente y acorde a luchar contra determinados problemas de tu piel. ¡No te lo pierdas!

Algunos consejos previos para hacer el jabón

Lo primero que vas a necesitar es un poco de jabón neutro. Si es de nácar, mucho mejor, pues ayuda mucho a aclarar las manchas y a mantener el cutis menos pigmentado.
Lo que vas a hacer luego es prepararlo con lo que tu necesitas. Por ejemplo, si tienes cutis seco, le puedes añadir aceite de oliva, y de inmediato lo conviertes en un jabón nutriente para tu piel.
Si tienes problema de piel grasa y necesitas combatir el acné, le añades aceite de jojoba, que a pesar de ser un aceite, hace que la piel trabaje con su propia grasa. Da muy buenos resultados, incluso para los granos.
También se le puede añadir azúcar, avena bien fina o un poco de miel. Una cucharadita será la medida para lo que sea que agregues. Si quieres exfoliar, prueba con el azúcar o la avena. Incluso partiendo de la misma barra de jabón, puedes preparar dos opciones diferentes.

Cómo hacer un jabón facial para tu rostro

En primer lugar, toma la barra de jabón que vayas a usar y rállala.
Comienza a derretir tu jabón en una cacerola con fondo antiadherente. Agrega un chorro de agua y revuelve hasta disolver por completo.
Añade ahora el aceite de oliva, de jojoba, la miel, azúcar, avena, glicerina... Lo que consideres para nutrir tu piel. Siempre de a una cucharadita por ingrediente.

Una vez que estén todo integrado entre sí, colócalo en un molde, cúbrelo con papel de aluminio y llévalo al refrigerador hasta que solidifique por completo.
Si quieres hacerlo bien bonito, colócalo en un molde con alguna forma especial, como podría ser de estrella; y hasta ponle algunas gotas de colorante si le quieres dar algún tono.

¡Excelentes trucos te ha brindado Anastassia! Ahora, no tienes más que ponerlos en práctica para obtener el mejor provecho posible de estos jabones naturales.

Aquí podrás ver el vídeo completo con la explicación de Anastassia:

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