Mascarilla de aloe vera y pepino para las patas de gallo

Mascarilla vegetal para el contorno de ojos

Si bien por el paso del tiempo las patas de gallo aparecen en el contorno de los ojos, estas pueden reducirse. Para lograrlo puedes optar por mascarillas vegetal, como por ejemplo la mascarilla de aloe vera y pepino.

Las patas de gallo son arrugas que aparecen en el parte externa del contorno de los ojos. Estas son generalmente las primeras arrugas que aparecen en el rostro.

En cuanto comienzan a aparecer, puedes reducir su evolución a través de ciertas mascarillas o cremas especiales. Incluso, tú misma puedes preparar dichas mascarilla utilizando productos vegetales naturales, como el aloe vera y el pepino.

Receta de mascarilla de aloe vera y pepino para las patas de gallo

Ingredientes

50 gr. de acíbar de aloe vera.
50 gr. de pepino.
50 cc. de agua destilada.

Preparación

Corta el pepino en rodajas y licua junto con el acíbar del aloe vera y el agua destilada.
Una vez lograda la mezcla, obtendrás una pasta.
Si consideras que la mascarilla es muy espesa, puedes añadirle un poco más de agua destilada.
Una vez preparada, ya está lista para usar. Puedes guardarla en un pote o frasco en el refrigerador por una semana.

¿Cómo aplicar la mascarilla vegetal para reducir las patas de gallo?

Dicha mascarilla se aplica por la noche, antes de irte a dormir.
Toma con tus dedos un poco de esta mascarilla, y aplica, con suaves masajes, sobre el contorno externo de los ojos.
Deja actuar toda la noche. A la mañana siguiente lava el rostro con agua fresca.

Esta mascarilla tiene las propiedades hidratantes, humectantes y regenerantes del aloe vera, que se complementan con las propiedades hidratantes del pepino.

Si bien existen muchas cremas y mascarillas para reducir las arrugas del contorno de los ojos, esta mascarilla vegetal puede serte de mucha utilidad para prevenirlas y tratarlas.

Recuerda que, además de las mascarillas, existen trucos, consejos y sugerencias que pueden ayudarte a reducir las patas de gallo de forma natural.

No olvides cuidarte de los factores que pueden influir en la aparición de las patas de gallo, como por ejemplo el sol, el viento y el frío.